"Ser Buena Gente"
La inteligencia y el sentido común son habilidades propias de los seres humanos, que nos permiten ser capaces de pensar antes de actuar, de dar y recibir respeto, de ser corteses, de ponernos en el lugar de los otros, de aceptar que podemos aprender de los demás; en otras palabras de aplicar esas sabías palabras que nos enseñaron papá y mamá desde la infancia: “Ser buena gente"
El respeto, la responsabilidad, la cortesía y la previsión son valores que, por lo general, nos enseñan en la casa y que siempre tratamos de inculcarle a nuestros familiares. Cada vez que tomes el mando de un vehículo, bien sea carro, motocicleta o maquinaria amarilla, ten presente llevar contigo esas buenas costumbres que te hacen un colombiano ejemplar.
La responsabilidad
Es esa actitud de vida que nos permite reflexionar, administrar, orientar y valorar los resultados de nuestros actos. Aplica esa capacidad de mirar un poco más allá y visualizar las consecuencias positivas que tiene ser un conductor responsable:
Elabora un plan de viaje y elige la ruta más segura. Antes de tomar el mando de un vehículo, cerciórate de estar en buen estado de salud y de ánimo. Se consciente de que el exceso de velocidad es la principal causa de accidentalidad vial. Estudia los manuales e investiga
sobre las condiciones técnicas y mecánicas del vehículo que está bajo
tu responsabilidad, por ejemplo, la capacidad máxima de carga. Lleva una lista de chequeos y de mantenimientos técnicos y mecánicos preventivos. Si conduces un vehículo empresarial, solicita entrenamiento en seguridad vial y mecánica básica. Si manejas motocicleta, selecciona una que se ajuste a tu estatura, fuerza y contextura física. Antes de poner en marcha la motocicleta, comprueba que las luces y las direccionales funcionen correctamente.
La previsiónSe trata de anticiparnos a lo que se pueda presentar en el futuro y estar preparados para enfrentarlo. Cada vez que vayas al volante, sé prudente, analiza las posibles consecuencias y toma decisiones de manera consciente:
Utiliza siempre el casco o el cinturón de seguridad. Solicita en tu empresa el manual de instrucciones
para saber cómo actuar en caso de presentar eventualidades, en los
vehículos empresariales, como robos, accidentes y varadas, entre otros. Revisa que el equipo de carretera sea el adecuado para la vía por la que tienes planeado transitar. Calibra el aire de las llantas de acuerdo con el viaje que vayas a realizar. Pídele a tu jefe un entrenamiento básico en el nuevo vehículo que manejarás. Al pasar frente a animales, recuerda aplicar la máxima prudencia para evitar asustarlos. Estudia técnicas de conducción para emergencias,
por ejemplo, es mejor desviarse a la derecha que hacia los carriles con
tráfico en sentido contrario; si el sitio es plano es preferible
salirse de la vía que frenar en seco; es menos peligroso irse contra un
matorral que chocar contra un árbol o un poste. Como conductor de cualquier vehículo es importante que uses las direccionales con más de 100 metros de anticipación, para indicar giros o cambios de carril. 
La cortesíaEs un valor que facilita la buena convivencia, se trata de las manifestaciones que hacemos de afecto, de respeto o de atención hacia otros individuos. Trata en las vías a los demás conductores y transeúntes como quisieras que te trataran a ti.
Disminuye la velocidad
a 30 km/hora en los lugares públicos donde haya concentración de
personas, cuando la vía esté mojada o en dónde existan charcos, para
evitar salpicar a los demás. Cede el paso prioritario a las ambulancias y a los vehículos de emergencias. En las noches baja las luces cuando viene otro vehículo de frente o estás detrás de otro. Recuerda que el pito está diseñado para ser una señal de alarma, no para desahogarse.
La mala utilización de este instrumento, por lo general conlleva a
producir contaminación por ruido en el ambiente, rabia, enfrentamientos y
más congestión.
El respetoHace parte de la esencia de las relaciones humanas, del trabajo en equipo, de la vida en comunidad. Nos habla de acatar la autoridad, de aceptar las diferencias y de promover la transparencia. Respeta las normas y los derechos de todos con quienes interactúas en los viajes.
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Es esa actitud de vida que nos permite reflexionar, administrar, orientar y valorar los resultados de nuestros actos. Aplica esa capacidad de mirar un poco más allá y visualizar las consecuencias positivas que tiene ser un conductor responsable:
Elabora un plan de viaje y elige la ruta más segura. Antes de tomar el mando de un vehículo, cerciórate de estar en buen estado de salud y de ánimo. Se consciente de que el exceso de velocidad es la principal causa de accidentalidad vial. Estudia los manuales e investiga
sobre las condiciones técnicas y mecánicas del vehículo que está bajo
tu responsabilidad, por ejemplo, la capacidad máxima de carga. Lleva una lista de chequeos y de mantenimientos técnicos y mecánicos preventivos. Si conduces un vehículo empresarial, solicita entrenamiento en seguridad vial y mecánica básica. Si manejas motocicleta, selecciona una que se ajuste a tu estatura, fuerza y contextura física. Antes de poner en marcha la motocicleta, comprueba que las luces y las direccionales funcionen correctamente. La previsiónSe trata de anticiparnos a lo que se pueda presentar en el futuro y estar preparados para enfrentarlo. Cada vez que vayas al volante, sé prudente, analiza las posibles consecuencias y toma decisiones de manera consciente:
Utiliza siempre el casco o el cinturón de seguridad. Solicita en tu empresa el manual de instrucciones
para saber cómo actuar en caso de presentar eventualidades, en los
vehículos empresariales, como robos, accidentes y varadas, entre otros. Revisa que el equipo de carretera sea el adecuado para la vía por la que tienes planeado transitar. Calibra el aire de las llantas de acuerdo con el viaje que vayas a realizar. Pídele a tu jefe un entrenamiento básico en el nuevo vehículo que manejarás. Al pasar frente a animales, recuerda aplicar la máxima prudencia para evitar asustarlos. Estudia técnicas de conducción para emergencias,
por ejemplo, es mejor desviarse a la derecha que hacia los carriles con
tráfico en sentido contrario; si el sitio es plano es preferible
salirse de la vía que frenar en seco; es menos peligroso irse contra un
matorral que chocar contra un árbol o un poste. Como conductor de cualquier vehículo es importante que uses las direccionales con más de 100 metros de anticipación, para indicar giros o cambios de carril. La cortesíaEs un valor que facilita la buena convivencia, se trata de las manifestaciones que hacemos de afecto, de respeto o de atención hacia otros individuos. Trata en las vías a los demás conductores y transeúntes como quisieras que te trataran a ti.
Disminuye la velocidad
a 30 km/hora en los lugares públicos donde haya concentración de
personas, cuando la vía esté mojada o en dónde existan charcos, para
evitar salpicar a los demás. Cede el paso prioritario a las ambulancias y a los vehículos de emergencias. En las noches baja las luces cuando viene otro vehículo de frente o estás detrás de otro. Recuerda que el pito está diseñado para ser una señal de alarma, no para desahogarse.
La mala utilización de este instrumento, por lo general conlleva a
producir contaminación por ruido en el ambiente, rabia, enfrentamientos y
más congestión. El respetoHace parte de la esencia de las relaciones humanas, del trabajo en equipo, de la vida en comunidad. Nos habla de acatar la autoridad, de aceptar las diferencias y de promover la transparencia. Respeta las normas y los derechos de todos con quienes interactúas en los viajes.
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La responsabilidad
Es esa actitud de vida que nos permite reflexionar, administrar, orientar y valorar los resultados de nuestros actos. Aplica esa capacidad de mirar un poco más allá y visualizar las consecuencias positivas que tiene ser un conductor responsable:
Elabora un plan de viaje y elige la ruta más segura. Antes de tomar el mando de un vehículo, cerciórate de estar en buen estado de salud y de ánimo. Se consciente de que el exceso de velocidad es la principal causa de accidentalidad vial. Estudia los manuales e investiga
sobre las condiciones técnicas y mecánicas del vehículo que está bajo
tu responsabilidad, por ejemplo, la capacidad máxima de carga. Lleva una lista de chequeos y de mantenimientos técnicos y mecánicos preventivos. Si conduces un vehículo empresarial, solicita entrenamiento en seguridad vial y mecánica básica. Si manejas motocicleta, selecciona una que se ajuste a tu estatura, fuerza y contextura física. Antes de poner en marcha la motocicleta, comprueba que las luces y las direccionales funcionen correctamente. La previsiónSe trata de anticiparnos a lo que se pueda presentar en el futuro y estar preparados para enfrentarlo. Cada vez que vayas al volante, sé prudente, analiza las posibles consecuencias y toma decisiones de manera consciente:
Utiliza siempre el casco o el cinturón de seguridad. Solicita en tu empresa el manual de instrucciones
para saber cómo actuar en caso de presentar eventualidades, en los
vehículos empresariales, como robos, accidentes y varadas, entre otros. Revisa que el equipo de carretera sea el adecuado para la vía por la que tienes planeado transitar. Calibra el aire de las llantas de acuerdo con el viaje que vayas a realizar. Pídele a tu jefe un entrenamiento básico en el nuevo vehículo que manejarás. Al pasar frente a animales, recuerda aplicar la máxima prudencia para evitar asustarlos. Estudia técnicas de conducción para emergencias,
por ejemplo, es mejor desviarse a la derecha que hacia los carriles con
tráfico en sentido contrario; si el sitio es plano es preferible
salirse de la vía que frenar en seco; es menos peligroso irse contra un
matorral que chocar contra un árbol o un poste. Como conductor de cualquier vehículo es importante que uses las direccionales con más de 100 metros de anticipación, para indicar giros o cambios de carril. La cortesíaEs un valor que facilita la buena convivencia, se trata de las manifestaciones que hacemos de afecto, de respeto o de atención hacia otros individuos. Trata en las vías a los demás conductores y transeúntes como quisieras que te trataran a ti.
Disminuye la velocidad
a 30 km/hora en los lugares públicos donde haya concentración de
personas, cuando la vía esté mojada o en dónde existan charcos, para
evitar salpicar a los demás. Cede el paso prioritario a las ambulancias y a los vehículos de emergencias. En las noches baja las luces cuando viene otro vehículo de frente o estás detrás de otro. Recuerda que el pito está diseñado para ser una señal de alarma, no para desahogarse.
La mala utilización de este instrumento, por lo general conlleva a
producir contaminación por ruido en el ambiente, rabia, enfrentamientos y
más congestión. El respetoHace parte de la esencia de las relaciones humanas, del trabajo en equipo, de la vida en comunidad. Nos habla de acatar la autoridad, de aceptar las diferencias y de promover la transparencia. Respeta las normas y los derechos de todos con quienes interactúas en los viajes.
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Utiliza siempre el casco o el cinturón de seguridad. Solicita en tu empresa el manual de instrucciones
para saber cómo actuar en caso de presentar eventualidades, en los
vehículos empresariales, como robos, accidentes y varadas, entre otros. Revisa que el equipo de carretera sea el adecuado para la vía por la que tienes planeado transitar. Calibra el aire de las llantas de acuerdo con el viaje que vayas a realizar. Pídele a tu jefe un entrenamiento básico en el nuevo vehículo que manejarás. Al pasar frente a animales, recuerda aplicar la máxima prudencia para evitar asustarlos. Estudia técnicas de conducción para emergencias,
por ejemplo, es mejor desviarse a la derecha que hacia los carriles con
tráfico en sentido contrario; si el sitio es plano es preferible
salirse de la vía que frenar en seco; es menos peligroso irse contra un
matorral que chocar contra un árbol o un poste. Como conductor de cualquier vehículo es importante que uses las direccionales con más de 100 metros de anticipación, para indicar giros o cambios de carril. La cortesíaEs un valor que facilita la buena convivencia, se trata de las manifestaciones que hacemos de afecto, de respeto o de atención hacia otros individuos. Trata en las vías a los demás conductores y transeúntes como quisieras que te trataran a ti.
Disminuye la velocidad
a 30 km/hora en los lugares públicos donde haya concentración de
personas, cuando la vía esté mojada o en dónde existan charcos, para
evitar salpicar a los demás. Cede el paso prioritario a las ambulancias y a los vehículos de emergencias. En las noches baja las luces cuando viene otro vehículo de frente o estás detrás de otro. Recuerda que el pito está diseñado para ser una señal de alarma, no para desahogarse.
La mala utilización de este instrumento, por lo general conlleva a
producir contaminación por ruido en el ambiente, rabia, enfrentamientos y
más congestión. El respetoHace parte de la esencia de las relaciones humanas, del trabajo en equipo, de la vida en comunidad. Nos habla de acatar la autoridad, de aceptar las diferencias y de promover la transparencia. Respeta las normas y los derechos de todos con quienes interactúas en los viajes.
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